jueves, junio 22, 2006

All the lonely people, where do they all come from?

Para Paulo

¿A qué lugar pertenecemos los que no nos ponemos ninguna camiseta?

Yo no me siento parte de nada. A veces, cuando juega la selección de futbol, se me antoja que ganen, pero sólo por cortesía. Después de todo hay muchos aficionados cuyo corazón pende de un hilo durante 90 minutos.

Si me importara un poco más el tema, podría incluso formular metáforas sobre la selección de futbol y su país; nuestra eterna imposibilidad de concretar; el discursete ese de "jugué bien pero perdí" o aquél de "no importa cómo le hicimos, estamos en octavos de final".

Pero yo no traigo "la verde". No suelo comprar afiliaciones. Tampoco me considero "parte" de una empresa. Vamos, ni siquiera soy parte de mi familia.

Yo traigo tatuados los nombres de mis amigos y de algunos de mis hermanos. De la persona que quiero. De un par de niños a los que adoro nomás porque me da la gana adorarlos (no son parientes). Me alineo con algunos escritores, pintores, músicos, artistas.

Procuro que mis camisetas no tengan logotipos conocidos.