lunes, noviembre 28, 2005

¿Para ser cineasta hay que ser mamón?

Nomás pregunto. De veras que aquél adagio de "nomás se sube a un ladrillo y se marea" aplica perfecto para muchos artistas mexicanos, pero los cineastas hacen que la tierra retiemble en sus centros con esta máxima.
Si alguna vez se vuelve usté famoso querido tazista, no se manche con los medios, porfa. ¿Uno que tiene la culpa de sus malcogidas, a ver?